Berdugo R., AbimaelAraujo Colina, JohannaCataño Quintero, OmerisMartínez Sandoval, JoséReales Pertuz, OlgaTorres Vargas, Carlos2021-05-052021-05-052009https://hdl.handle.net/20.500.12442/7557El desarrollo de las diferentes actividades humanas, cualquiera que éstas sean, están sujetas a amenazas de tipo antrópico o natural, que cuando se presentan como un hecho real sus resultados se reflejan en víctimas. Se conoce como instinto de conservación a los diferentes tipos de respuesta ante las amenazas, siendo uno de los más típicos la huida del sitio de peligro. Es claro que no basta con poseer dicho instinto, ya que aún en los casos de huir se debe saber para donde. El comportamiento humano ante las emergencias, representa una condición variable muchas veces imprevisibles, influido entre otros aspectos, por la personalidad, educación, experiencia, reacción de las otras personas ante el siniestro y el nivel de entrenamiento que se tenga para enfrentar los riesgos. Es claro entonces, que buscar un mecanismo mediante el cual logremos canalizar los diferentes comportamientos, representará, en el evento de un siniestro un factor positivo para el enfrentamiento del mismo. Por lo anterior, las organizaciones han visto la necesidad de realizar planes encaminados a adoptar actitudes positivas ante los diferentes siniestros, para que en el evento de presentarse, las posibilidades de éxito para salvaguardar la integridad de las personas aumenten.pdfspaAttribution-NonCommercial-NoDerivatives 4.0 InternacionalAtención de emergenciasSalud ocupacionalDocumento guía para la implementación del plan general para la atención de emergencias en empresasinfo:eu-repo/semantics/restrictedAccessinfo:eu-repo/semantics/other